Aprendemos el mundo según cómo se nos muestra. El afán de comprenderlo y, debe decirse, dominarlo, desde hace mucho tiempo nos ha llevado a dividir el mundo en mitades, en contraposiciones y complementos. Bueno y malo, día y noche, mente y cuerpo, etc. Llámese cómo se llame (dualidad, binomio, relación biunívoca, dialéctica), al final siempre son dos. Silicona 5.0, novela de Jorge Majfud, autor nacido en Uruguay y hoy radicado en EE. UU., donde da clases en la universidad de Jacksonville, Florida, recorre las dos caras de este mundo-moneda, como en un vehículo que, aun si sólo avanza, ciego, hacia delante, permite ver ambos lados del paisaje.
El interés de la novela por remarcar esta condición doble, para después comentarla y criticarla, se hace evidente ya desde su estructura, dividida en dos partes: “Del otro lado” y “Del otro otro lado”. Igualmente, el nombre de su protagonista, Facundo, lleva esta condición doble, pues remite al libro de Sarmiento Civilización y barbarie, sin embargo, este Facundo no descansa en la conjunción de los dos elementos, antes se encuentra asediado por ellos. Facundo Walsh Ocampo oscila, mientras avanza, entre lo uno o lo otro. Durante la historia, aparecen otros nombres significativos, como el de Silvanna, que se encuentra entre lo natural y lo artificial; Elena, la más bonita según Homero, una belleza de la que se habla, pero que no aparece; Ernesto, quien combate desde la crítica; y Jeff, ya no Jeffrey, sino un mero ruido.
No hay elemento ni detalle baladí dentro de Silicona 5.0, cada uno tiene un significado, si bien unos más profundos que otros, relevante para la novela. Estas pequeñas claves se muestran a veces como una referencia, unas veces llanamente y otras con ligera sutileza (desde el filósofo Diógenes a Evangelion, pasando por Maradona, Donald Trump e incluso al propio Majfud). En ocasiones las cosas se muestran escondidas en el título de un capítulo, en una palabra concreta, en un gesto mínimo etc. La construcción de los capítulos, de los párrafos y de las oraciones, tampoco representan una arbitrariedad. Todo se halla colocado de modo que se transmita algo. La habilidad de Majfud para construir el mundo con palabras vuelve a Silicona 5.0 en una novela, dentro de su forma, brillantemente escrita. En ella, forma y fondo se corresponden en el mismo binomio, le otorgan una experiencia al lector que no se haya en todos los libros.
El primer capítulo, Hasta que el otro dijo basta, considero, ejemplifica en buen grado esta correspondencia entre forma y fondo. En él, se repite la palabra ‘había’ más de treinta veces en un corto periodo de tres páginas tan sólo. Ante esta repetición, en apariencia, innecesaria, surgen opiniones apresuradas sobre la calidad de la escritura, sin embargo, éstas pronto se disipan y desmienten, ya que este fenómeno no vuelve a aparecer en el resto de la novela. La escena, a partir de una reflexión sobre el presente y los recuerdos, busca marcar una sensación de pérdida, de derrota y desconcierto, de abandono y desencuentro. Jorge Majfud, pienso, debido a su cercanía con la lengua inglesa, asimila el verbo ‘haber’ con ‘to have’ que, a su vez, significa tener. Esta conjunción entre un significado y otro representa, más que una adquisición del inglés, una recuperación, ya que, antiguamente, ‘haber’ en español también significaba ‘poseer’. Después de esta posibilidad, se mira con otros ojos la reiteración de ese ‘había’, ahora no sólo representa una marca del tiempo pasado, sino también significa la pérdida, pues se le adhiere un ‘tenía’.
La novela, como se dijo, transcurre en dos partes, cada una con sus particularidades. La primera parte transcurre en EE. UU., al menos simbólicamente, y cuenta, grosso modo, el desarrollo de las ginoides (femenino de androides) Silvanna, su trasfondo; la segunda ocurre en Tijuana, México, y muestra la búsqueda de Facundo por su identidad a partir del presente y sus recuerdos. Por sí mismas, cada una de las partes son disímiles, contrarias la una de la otra. La primera parte va construida de manera separada, como si se tratara de un rompecabezas que armamos por fragmentos aislados, sin bordes, pues ya conocemos el resultado; la segunda, se construye desde las orillas, como si se desvelara un misterio. Esta construcción sirve para acentuar el estado de Facundo, el protagonista, pues, en la primera, con capítulos largos en comparación a otros, se limita a contar lo que pasó, como una historia ya contada, una anécdota a veces burocráticamente larga que se revisa de vez en cuando, mientras que la segunda, con episodios cortos, muestra la sensación de estar fuera de la zona de confort que tiene Facundo, va frenético, mareado, en busca de algo desconocido o que cree desconocido. En un lado se pierde, en otro se encuentra. Parecieran historias distintas y sólo unidas por el mismo protagonista y uno que otro guiño a los demás personajes, sin embargo, al unirse, logran más que únicamente ligar dos historias. Las dos partes representan dos caras que se confrontan, contrarias, y especialmente se remarcan las dualidades ocio-negocio, natural-artificial, mente-cuerpo.
El confrontamiento entre cada una de las caras que presenta la novela se construye a partir de reflexiones que alguien hace (a veces Facundo, a veces el narrador, a veces otra voz). Estas reflexiones, aún más que el argumento, conforman el verdadero motor que otorga vida a Silicona 5.0. En un estilo que en momentos recuerda a Milan Kundera, dichas reflexiones surgen a partir de fragmentos de la historia que pueden o no resultar importantes para ella. Las reflexiones abarcan una gran cantidad de temas como el capitalismo, la música, la pornografía, la tecnología, la política, etc. Todo se desvela en los recuerdos. Como en la vida real, el pensamiento se origina en situaciones no pensadas. Puede nacer de mirar a alguien, de leer lo que alguien escribió en la pared o la puerta de un sanitario, de una canción que ni siquiera nos guste, de un sinfín de posibilidades. Todo eso nos lleva al recuerdo. El recuerdo, nos ayuda, más que a volver al pasado, a construir el presente, a construirnos ante el asedio del futuro.
Silicona 5.0 por momentos pareciera una novela distópica, pero no hay distopía. Más que advertir o anunciar lo que viene, critica y denuncia lo que ya es, cabe resaltar que la novela se desarrolla en el año 2018. “No es a la tecnología a lo que le tengo miedo, dice un personaje, sino a la cultura que crea todo eso.” Ese, me parece, es el espíritu que acompaña a Silicona 5.0, uno de crítica, pero no de miedo. De vacío llenos, como Facundo, solemos buscar en la novedad la felicidad o un artificio para sentirnos medio llenos, a sabiendas de que el vacío permanece, pero quizá no sea cosa de ver en el futuro la esperanza, sino buscar, en el pasado, lo que nos hace ser. No se trata de buscar una razón, sino buscar un sentido.
Revista Avión de Papel. Mexico. Diciembre 2020.
Ficha técnica: Majfud, Jorge. Silicona 5.0. España: Baile del sol, 2020. Impreso.
ISBN: 978-84-17263-76-8